Cómo debería ser el desarrollo de aplicaciones en 2020.
Cada vez son más empresas las que deciden invertir en el desarrollo de aplicaciones y buscan tener la suya propia. Ya sea para tener una tienda o como servicio al cliente entre otros muchos usos que se le pueden dar a una aplicación de una tienda en específico. Obviamente con la aplicación quieren mantener la línea de su marca, puesto que forma parte de esta junto a la página web las tarjetas los folletos o cualquier tipo de aplicación que pueda necesitar para darse a conocer.
Sin embargo, podemos encontrarnos casos en qué el diseño se ha llevado por delante la usabilidad de las aplicaciones. En estos enfoca el desarrollo UI/UX que cuidan tanto del diseño cómo de la experiencia del usuario. Todo esto tiene que estar centrado el maximizar la organización y la usabilidad de las aplicaciones. Hay que tener en cuenta que el público puede formar parte de un gran espectro de personas diferentes. Y es que, aunque en el público objetivo todas las personas compartan determinadas características esto no quiere decir que tengan las mismas capacidades. ¿Qué queremos referirnos con todo esto? Puede parecer lioso, pero en realidad es muy sencillo. En nuestro público objetivo podemos encontrar personas con algún tipo de discapacidad visual, como el daltonismo o la vista cansada. También pueden tener dificultades de lectura como las personas que sufren dislexia. O simplemente ser personas mayores qué necesitan aplicaciones sencillas para poder entender cómo funcionan.
A la hora de hacer desarrollo de apps aplicaciones debemos tener en cuenta todos los posibles tipos de personas qué van a hacer uso de nuestra aplicación. Es por esto que debemos mantener determinados niveles de usabilidad que afectan al diseño de las aplicaciones.
Características que todas las aplicaciones deberían tener en 2020.
La parte más importante qué debemos destacar es la iconografía. En la aplicación deben estar indicadas todas las posibilidades que nos ofrece de manera clara. Esto se puede conseguir a través de iconos. Estos iconos deben presentarse con formas sencillas, visuales y fáciles de entender, además de tener un tamaño correcto para ser visualizados. Aun así debemos mantener nuestras interfaces simples. No puede haber demasiados elementos ya que entorpece la lectura. Cada elemento debe tener un propósito concreto que haga la interfaz lo más sencilla y optimizada para el uso posible.
Los colores y el contraste son herramientas esenciales para ayudar al usuario a ver las características clave de cada pantalla. Es importante que el usuario sepa en todo momento en qué parte de la aplicación se encuentra y qué es lo que está haciendo. Por ejemplo si nuestra aplicación está enfocada al servicio al cliente y un cliente ha intentado contactar con nosotros, debe saber en qué momento de la comunicación se encuentra, si en espera, en comunicación con nosotros, si se ha cerrado la comunicación, si se ha solucionado el problema, etc.
El texto también juega una parte fundamental en el desarrollo de apps aplicaciones a la hora de indicar al usuario qué está haciendo y dónde se encuentra dentro de nuestra aplicación. Minimizar las líneas, utilizar una jerarquía y un tamaño de letra legible son características totalmente indispensables actualmente en el desarrollo de aplicaciones.
Si mantenemos todas estas cosas en mente a la hora de hacer un desarrollo de aplicaciones óptimo, lograremos entregar a nuestros clientes un trabajo con el que estarán satisfechos y que cumplirá todas las expectativas. Al fin y al cabo, es tan fácil instalarse una aplicación como desinstalarla. Y si nuestros clientes han decidido invertir en el desarrollo de apps aplicaciones, es porque buscan que su público objetivo pueda tener nuevas herramientas para comunicarse con ellos y que les resulten útiles.